Quizás hayas empezado el entrenamiento con el baño cuando tu niño estaba aprendiendo a caminar, o tal vez decidiste esperar hasta ahora. Si estás apenas empezando, puede resultarte útil mirar algunas de las sugerencias sobre entrenamiento con el orinal en la sección de Primera infancia.

Usar el baño en forma independiente implica un conjunto de destrezas y es un gran logro para todo niño. Aunque hay desacuerdo entre los padres, los médicos y los especialistas en desarrollo infantil acerca de cuándo comenzar con esto, en muchos centros preescolares se espera que sus alumnos puedan ir al baño solos, de modo que tu hijo se beneficiará si ya domina esto cuando empiece esa etapa.

Las siguientes sugerencias te van a ayudar a trabajar con tu niño para que sea independiente para ir al baño.

Consejos para ayudar a tu hijo a aprender destrezas que le den independencia

  • En casa, mantén libre de obstáculos el recorrido de tu hijo hasta el baño. El exceso de cosas puede hacer que cualquier niño dude de moverse libremente por miedo de caerse y lastimarse. Tal vez te convenga poner un trozo de tela con alguna textura sobre la puerta del baño o colgar una cosa pequeña del pomo de la puerta, de modo que le sea más fácil encontrar el lugar correcto.
  • Guarda siempre en el mismo lugar los objetos que tu hijo use en el baño. Por ejemplo, si necesita un pequeño taburete para llegar al inodoro, controla que esté exactamente donde espera encontrarlo. Haz lo mismo con el papel higiénico, el jabón y la toalla de manos—colócalos en lugares a los que pueda llegar solo.
  • Ayúdalo a entender que se necesita privacidad. Haz que la acción de cerrar la puerta sea parte de la rutina, de modo que haga lo mismo cuando use el baño en otro lugar que no sea su casa.
  • Si los broches de presión o automáticos y las cremalleras son difíciles de usar para tu niño en edad preescolar, tal vez convenga que pienses en reemplazarlos con velcro. Pero continúa trabajando con tu hijo en el aprendizaje de formas más complicadas de cerrar las prendas. El uso de las técnicas de mano bajo mano o mano sobre mano para mostrarle cómo manipular los cierres puede ayudarle ahora a aprender cómo hacerlo.
  • Enseñarle a tu hijo a orinar de pie puede llevar tiempo, por eso, trata de ser paciente. Si tu pequeño tiene algún resto visual, podrías probar a usar rotuladores de color en el inodoro para que le indiquen la dirección. Muéstrale cómo usar los pies y el borde de inodoro para alinearse. Durante un tiempo, tal vez tengas que recordarle que tiene que levantar la tabla primero. Y también es posible que tengas que ayudarlo mano sobre mano al comienzo, para que aprenda a tomar la dirección en forma correcta.
  • Si tiene un accidente, haz que participe en limpiar, sin que esto sea un castigo. Conviértelo en una parte común de lo que se necesita hacer cuando uno no llega al baño a tiempo. Muéstrale dónde poner la ropa sucia y cómo secar el piso. No esperes la perfección—¡puede ser que termines haciendo la mayor parte del trabajo de limpieza!

Usar baños con los que no está familiarizado

Muchos chicos (y adultos, en realidad) con vista o discapacitados visuales, se sienten incómodos y a veces nerviosos si tienen que usar baños públicos. Como te puedes imaginar, tu niño de edad preescolar tal vez necesite más ayuda cuando usa un baño con el que no está familiarizado. Puedes ayudarle a recorrer el camino hacia la independencia describiéndole dónde están localizadas las cosas en general (por ejemplo, el papel higiénico está usualmente del lado derecho o del izquierdo del inodoro; el botón para descargar el agua puede estar detrás del lado derecho del inodoro o tal vez se trate de uno plano o con relieve en el medio de la parte superior de la cisterna; generalmente, los botones planos se presionan hacia adentro y los que tienen relieve, son para levantarlos). Elige una hora relativamente tranquila en un lugar tal como un restaurante y haz un “tour” con tu hijo en el baño. Descríbele el lugar y muéstrale las cabinas, lavabos y otras características; dale tiempo para que toque los enseres fijos y se oriente.

Armado con esta información y bastante confiado en su dominio de las destrezas necesarias, tu hijo habrá dado un fundamental paso adelante hacia la independencia. Y puedes felicitarte por haberlo ayudado a lograr esta meta.