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Cuando un niño tiene discapacidad visual y retos adicionales, puede necesitar el empleo de métodos alternativos para comunicar sus pensamientos y necesidades. Tu hijo requiere una variedad de sistemas tanto para expresar sus pensamientos como para entender lo que los demás le están comunicando. La expresión “comunicación aumentativa y alternativa” (AAC) se usa para referirse a métodos alternativos de comunicación que pueden apoyar los esfuerzos de un niño en este sentido.

Pueden usar auxiliares como objetos y dispositivos o no. Entre los ejemplos de métodos de comunicación sin apoyos se pueden incluir los gestos, expresiones faciales, vocalizaciones, el habla y el lenguaje de señas (como el Lenguaje de Señas Americano). Son ejemplos de formas de comunicación con elementos auxiliares los siguientes:

• usar un objeto real para transmitir un significado; por ejemplo, tu niño te da una taza para hacerte saber que tiene sed
• señalar símbolos, tales como imágenes o texturas en un tablero de comunicación o en un libro
• activar un dispositivo; por ejemplo, tu hijo presiona un interruptor o un botón en un aparato de grabación de voz, con lo que inicia una salida hablada que dice: “Tengo sed”.

Es importante que aplique tanto los métodos de comunicación sin elementos auxiliares como con ellos. Es importante que aprenda los primeros porque no siempre tendrá a su disposición un aparato u otro medio auxiliar cuando se le presente una situación en la que necesite comunicarse.

Dispositivos de AAC

Los dispositivos que se usan para la comunicación van desde los simples a los sofisticados. Hay una gran selección de ellos en el mercado y cambian continuamente. Las necesidades de cada niño son diferentes y un sistema de AAC se diseña usualmente en forma específica para cada caso.

Si tu hijo recibe servicios de educación especial, su equipo educativo trabajará con él para determinar qué dispositivos pueden resultarle más apropiados. Es importante que uno o más profesionales familiarizados con los temas de comunicación esté involucrado muy de cerca en esta evaluación. Entre ellos, se puede incluir un especialista en comunicación – normalmente un terapeuta de lenguaje que se haya especializado en el trabajo con niños con dificultades significativas en este campo- un terapeuta de lenguaje, un educador especial o un terapeuta ocupacional.

Es igualmente importante que el maestro de estudiantes con discapacidad visual contribuya a la selección de un sistema de AAC pues puede proporcionar datos acerca de cómo usa tu hijo la vista y otros sentidos para obtener información del mundo que lo rodea. Tu hijo va a necesitar distintas soluciones según sea, por ejemplo, el tamaño de los símbolos que puede ver en un dispositivo, en qué parte del campo visual tiene que estar situado el dispositivo a fin de que lo vea, o si entiende braille. Si tu niño tiene visión útil, debe hacérsele una evaluación de la visión funcional para determinar cómo usa la vissta antes de que se lo evalúe para ver qué tipo de sistema de AAC se adecua mejor a sus necesidades.

A continuación les ofrecemos algunas categorías amplias de dispositivos que algunos niños con discapacidad visual y retos adicionales usan:

• Tablero de comunicación: Se lo puede hacer con cartón, madera u otra superficie rígida. Normalmente, está cuadriculado y tiene dos o más símbolos. Estos pueden ser concretos, como objetos reales o parte de ellos; imágenes, tales como fotografías o dibujos; símbolos alfabéticos en letras comunes o en braille; o palabras en letras comunes o en braille. Cuando se usa un tablero de comunicación, un niño puede expresarse señalando el símbolo, imagen, letras o palabras que transmiten lo que quiere compartir.
• Libros de comunicación: Como en el caso de los tableros, en un libro de comunicación se seleccionan símbolos que tu hijo puede señalar a fin de transmitir su mensaje. El libro puede estar organizado de modo que en la primera página estén las categorías amplias, como emociones, comidas y gente. Una vez que él haya elegido la categoría, la persona con la que está hablando cambia las hojas hasta una en la que se ofrezcan opciones más específicas dentro de ella.
• Dispositivos de lenguaje grabado: Con un dispositivo de este tipo, alguien (como tú, el maestro o un hermano o hermana) graba mensajes para que los use el niño. Él activa el mensaje por medio de un interruptor u otro botón. Los sistemas con muchos interruptores pueden almacenar 4, 6, 8 o más mensajes. Hay sistemas muy complejos de AAC que permiten al usuario transmitir una amplia gama de información. Por ejemplo, si usa uno con cuatro espacios para mensajes pregrabados, puedes registrar cuatro para la hora de ir a la cama, tales como: “Quiero una manta”, “Léeme otro cuento”, “Te quiero, buenas noches” y “Siéntate conmigo y masajea mi espalda”. Cuando ya está acostado, él presiona el interruptor o botón adecuado para decirte lo que quiere.
• Teclados: Tu hijo puede escribir un mensaje en un teclado que luego lo repite en voz alta. Los símbolos del teclado pueden ser letras, palabras o imágenes.

Es importante recordar que tu niño necesita múltiples métodos para expresarse. Idealmente, no tendría que contar con un único medio de comunicación. Si se le proporciona una serie de opciones para que las use ahora y en el futuro, eso le ayudará a crecer y desarrollarse y participar más plenamente en la vida diaria.