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Esta es otra evaluación clave que el maestro de estudiantes con discapacidad visual lleva a cabo. Se la usa para averiguar qué sentidos son los que tu hijo usa más para obtener información del entorno. Una vez que se sabe esto, se pueden tomar decisiones sobre el o los métodos que debe usar para aprender y para alfabetizarse. Por ejemplo, si usa fundamentalmente y con más frecuencia el sentido del tacto para explorar el entorno, se puede recomendar que aprenda braille para leer y escribir. Algunos maestros de estudiantes con discapacidad visual combinan tanto la evaluación de visión funcional como la de los medios de aprendizaje en un solo proceso.

Después de revisar los antecedentes de tu hijo, el maestro especializado en deficientes visuales lo observa en una variedad de actividades. En cada uno de sus comportamientos va a tomar nota de qué sentido (tacto, vista u oído) usa fundamentalmente y cuáles son los sentidos adicionales, si es que los emplea. Por ejemplo, si tu hijo está explorando un juguete de colores brillantes, puede ser que pase la mayor parte del tiempo percibiendo la superficie, pero ocasionalmente, se lo ponga cerca de su ojo izquierdo. En este caso, la anotación va a ser que el sentido primordial en esta actividad es el tacto y el secundario, la vista.

El equipo educativo de tu hijo puede usar la información de esta importante evaluación para decidir cuál es el mejor medio de aprendizaje—el o los métodos que va a usar para realizar tareas esenciales, tales como leer y escribir y para obtener información—dadas las circunstancias. Pueden ser:

• letra impresa común
• letra impresa común con dispositivos de baja visión
• macrotipos
• braille
• materiales de audio como suplemento de uno de los otros métodos

(Ver Visión general de los medios alternativos donde encontrarán más información sobre este tema.)

Si tu hijo ya lee y escribe, el maestro de estudiantes con discapacidad visual también examinará sus actividades en este campo—la forma en que lo hace—como parte de la evaluación de los medios de aprendizaje, así como los materiales, o medios de alfabetización, que usa. Por ejemplo, en la clase de matemáticas, ¿usa papel y lápiz o una máquina braille para completar su tarea? El maestro también puede evaluar su velocidad de lectura, el grado de fatiga que experimenta al leer y hasta qué punto entiende lo que está leyendo. Sobre la base de esta información, puede hacer recomendaciones tales como que tu hijo se beneficiaría aprendiendo braille o que use un determinado dispositivo de baja visión.

Es importante que recibas una copia del informe de la evaluación de los medios de aprendizaje de tu hijo para tus archivos. Si no estás de acuerdo con las conclusiones o los cambios recomendados por el maestro acerca de la forma en que está aprendiendo las destrezas de lectura y escritura, puedes hablar con el maestro sobre otros abordajes y analizarlos con otros miembros del equipo educativo.